Con Marc en su casa Aby había dejado de pensar tanto en Kris. Hacía todo lo posible por no mirar por la ventana cada vez que Kris estaba en casa, ya que se había prometido a si misma no volver a esa ridícula actitud. Por esos días Marc ya había conseguido trabajo para ayudarla con la casa, y esa noche le tocaba trabajar.
-No te duermas tarde, eh.
-Vete a trabajar anda, que pareces mi padre- Dijo Aby entre risas.
Y Marc se fue.
Aby se hizo la cena y fue al sofá a ver la tele. Se estaba quedando dormida cuando unos golpes fuertes y rápidos en la puerta la sorprendieron.
-¡Aby! Abre..
Era Kris. Y sonaba extraño.
-Aby..
Fue corriendo a abrir. Lo primero que vio fue a Kris con los ojos rojos tambaleandose sin equilibrio y con una lágrima sobre su mejilla.
-Kris.. ¿Estás borracho?
-¿Eh? Y-Yo no.. ¿P-Puedo pasar?
-Es obvio que estas borracho Kris, ¿por qué tendría que..?
-Shhh-Dijo él, y la abrazó.-De verdad que no me encuentro muy bien..
Ella sorprendida y traicionando el poco orgullo que le quedaba le dejó entrar.
-¿Quieres.. Algo de cenar..? Estaba a punto de comer algo..
Kris se quedó mirandola. Avanzó poco a poco hacia ella y con cada paso ella tenía que retroceder para ocultar su enrojecida cara de vergüenza, hasta que su tobillo encontró el sofá y ya no podía avanzar más. Él tenía una expresión extraña, la agarró y la tumbó sobre el sofá antes de tumbarse encima de ella apoyando sus manos al lado de la cabeza de Aby.
-¿Q-Qué haces? ¿Estás loco? ¡Quítate ahora mismo!
Él sonrió y le besó la frente. Después se tambaleó de nuevo, cayó al suelo y se quedó dormido.
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